De Volkskrant informó anoche (de la cocina de la ANP, que cada vez me irrita más) que en un ataque aéreo Israel había matado a "por lo menos dos militantes palestinos islamistas radicales", justo después de que Hillary Clinton había abandonado la franja de Gaza.
Curiosamente el diario gratuito Spits en su edición impresa se refiere a "militantes palestinos islamistas" (o sea que ya no son radicales...).
De Volkskrant no sólo mencionó como fuente la ANP, sino también la agencia francesa de prensa AFP, y es interesante ver como Le Monde (que menciona AFP como su fuente) habla hoy de "tres hombres, de los cuales por lo menos dos eran combatientes islamitas", o sea que tampoco nada radicales.
Y de hecho cabe preguntarse si lo islamita tiene que ver algo, por poco que sea, con la acción. Se trata simplemente de palestinos, que se resisten completamente legítimamente contra la incesante violencia bélica de los israelíes. Y es que por lo menos es muy típico que nunca he visto el calificativo de "cristiano radical" con respecto a George W. Bush, ni de "judío radical" con respecto a cualquier criminal de guerra israelí.
La ANP probablemente pretende que nosotros concluyamos por lo de "islamita radical" que se trata de combatientes de Hamás, pero Le Monde explica claramente que uno de los tres asesinados era un combatiente del Jihad Islámico, el segundo era miembro del Frente Democrático por la Liberación de Palestina, mientras que no se había hecho pública la identidad del tercero.
Sería interesante saber cuántos muertos han causado los ataques israelíes desde el comienzo de su 'tregua' (¡y no se olviden los que se murieron por hambre!) y por otro lado cuantos muertos, o siquiera heridos, han causado los tubos de estufa volantes de la resistencia palestina. Probablemente ninguno, porque si los hubiera habido sin duda los periódicos habrían estado llenos de llamamientos de venganza.
Lo que me pregunto es si Maxime Verhagen sigue teniendo esta "impresión positiva" de hace unos días. Quizás nos podría volver a explicar quien tendría que "elegir el camino de la paz". Venga, Verhagen, sé honesto y no como político cristiano radical, sino como ministro de un país que se presenta como "democrático"...
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