martes, octubre 28, 2008

¡Suspiro...! Aquí vamos otra vez...

Hoy la sección de cartas al director del Metro neerlandés (que siempre pinta una imagen entristecedora de la vox populi) contenía una carte de un tal Piet Schapendonk de Almere.

En su carta Piet se queja del hecho de que la vida es muy dura para los cristianos en -sobre todo- Pakistán, Indonesia e Irak. Le preocupa por lo visto, porque "los Países Bajos han estado presentes allí durante muchos años para proteger a grupos de musulmanes que se combatían entre sí. Eso les ha costade mucho dinero a los contribuyentes y además ahora para la llamada reconstrucción."

Todavía en la opinión de Piet está claro por qué los medios de comunicación no lo denuncian, porque "eso podría dañar la imagen del tropel picajoso". Y todo eso, mientras que "en Irak se incendian casas de cristianos, se expulsan y/o asesinan sus habitantes" y eso además "a escala bastante grande".

También la "hipócrita ONU, las organizaciones de ayuda y los políticos, que sobre otros temas siempre se pronuncian ahora se están calladitos. Irak sigue pidiendo dinero y deja que se asesina a los cristianos. Está bien que sepamos que el dinero de uno se gasta en eso."

No me ha quedado claro en qué se basa Piet, ya que por lo que yo sé los neerlandeses nunca han jugado un papel de importancia (por pequeña que sea) y mucho menos habrán separado a musulmanes en Pakistán. Tampoco lo han hecho en Indonesia. Lo único que han cometido allí son graves crímenes de guerra (aunque las autoridades neerlandeses y los libros de historia los denominan -engañosamente- 'acciones policiales')
.

Y en Irak, donde sólo hay una presencia simbólica de neerlandeses, no se separa a musulmanes. ¡Al contrario! A pesar de lo que por lo demás se puede decir de Saddam Hussein, la religión no pintaba mucho allí, hasta que el régimen colonizador de EE.UU. invadió el país. Puede que Piet no se acuerde, pero el ministro de asuntos exteriores de Saddam Hussein y su vice-presidente (Tariq Aziz) era un cristiano.

Tampoco he oído que en Irak se incendian casas de cristianos ni que se expulsa y/o asesina a cristianos. Sí se sabe que hay muchísima violencia entre los chiitas y los suníes (dos corrientes dentro del islam, que -gracias a la política del régimen títere impuesto por Bush y sus compinches- se están combatiendo por el hierro y por el fuego). También puede ser útil (y necesario) recordar que las quemas de casas en gran escala y las masacres fueron iniciadas por los bombardeos de la banda de Bush, que sólo se preocupaba por una cosa: las reservas iraquíes de petroleo han de llegar a manos de los EE.UU. Y el que los Países Bajos están involucrados en la miseria en Irak (y Afghanistan) sólo se debe a las mentiras, el lameculeo y el chaqueteo del primer ministro Balkenende, su vice primer ministro Bos y todos los otros políticos que deliberadamente apoya(ro)n las guerras bushianas. Yo al menos no me puedo imaginar que sean tan terriblemente estúpidos que no comprendan ya desde el principio que esos crímenes de guerra no se pod(r)ían justificar de ninguna manera.

Y si llegan demandas de dinero desde Irak, no vienen de la población iraquí, sino de parte del régimen de marionetas instalado allí por EE.UU., y entonces ese dinero sólo se solicita para que los demás paguen los gastos causados por la banda de Bush.

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