sábado, agosto 22, 2009

Hugo Chávez: Esperanza para la humanidad (lectura recomendada)

"[...]

Existe otra historia: en una parte del océano había unos peces gitantes que se comían todos los peces pequeños. Unos de los pequeños se reunieron y decidieron que más valdría encontrar una solución para que no fueran comidos todos.

Decidieron desplazarse siempre en formación de tal modo que aparentaran ser un pez grande para así asustar a sus agresores. Lo hicieron y funcionó.

Quisiera sugerir que Chávez sólo es un pequeño pescado y no uno gigante. Tal vez ni siquiera esté a la cabeza del movimiento. Una mujer un día me dijo: "No soy una seguidora de Chávez. ¡Chávez está siguiento mis ideas!" Escuchando a Chávez en
Aló Presidente muchas veces le oigo decir a alguien: "¡Es una idea estupenda!"

Así que cuando Chávez fue secuestrado
[el 11 de abril de 2002], los peces organizados no dependieron de él y no dejaron de desplazarse. Se reagruparon un poco, se juntaron y por su tamaño colectivo, asustaron al pez gigante por lo que Chávez, el pequeño pez, fue liberado.

Esos gigantes van a intentar volver. Pero los peces pequeños han crecido y los peces gordos no han comido tan bien como antes. Esta vez no va a ser tan fácil. Personalmente, sugeriría a los peces grandes que aprendan a hacerse amigos de los peces pequeños. Los peces pequeños están dispuestos.

No hay que subestimar la importancia de esto si llegara a realizarse. Ha pasado mucho en los últimos años. Las azules aguas caribeñas que rozan Venezuela parecen mezclarse con los océanos Atlántico y Pacífico. Parece que algunas de ellas ya han tocado al Brasil y Argentina. Y Bolivia siempre ha querido volver a obtener el acceso al océano que hace años les quitó Chile.

Si los peces grandes y los peces pequeños consiguen aprender a vivir juntos en Venezuela, el mensaje podría viajar por todas las aguas del mundo, y todo el mundo ganará por lo que ha sufrido Venezuela. Hasta puede que los peces grandes en países como Estados Unidos, Inglaterra y España aprendan de esta lección."



El anterior fragmento [traducido por Entrelector] lo he copiado del libro Cowboy in Caracas [Un vaquero en Caracas], subtitulado "Los recuerdos de un norteamericano de la revolución democrática de Venezuela", escrito por Charles Hardy (y publicado en el año 2007 por Curbstone Press). Charles Hardy, sacerdote, fue destinado a Venezuela a trabajar en los barrios bajos de Caracas en el año 1984. Se lo tomó muy en serio y por eso vivió la miseria de los pobres venezolanos y notó los cambios que hubo y sigue habiendo desde la elección de Hugo Chávez en el año 1998. Desde hace años dejó de ser sacerdote y se casó, pero sigue viviendo en Venezuela y preocupándose por el bien de los (ya no tan extremamente) pobres de Venezuela.

Para contrarrestar la desinformación casi institucionalizada sobre Venezuela y Hugo Chávez de la prensa 'libre' en los países 'democráticos' (sí, también en España y los Países Bajos), la lectura de este libro es imprescindible para toda persona que comprenda el inglés.
No he podido localizar una traducción al castellano, pero sí podéis visitar la web en castellano de Charles Hardy.

No hay comentarios: