Desde el año pasado se están realizando muchas manifestaciones en España -y a veces también se ocupan las aulas de las universidades- para protestar contra el Proceso de Bolonia, que pretende mejorar la enseñanza superior en Europa, pero que en realidad quiere subordinar la enseñanza a los intereses del capitalismo internacional, lo que inevitablemente también ha de llevar a la privatización de -al menos partes de- la enseñanza.
Al ver las imágenes siguientes de una manifestación (del día 18 de este mes) delante del edificio de la Universidad Central de Barcelona (donde yo mismo estudié en el pasado) era como si el tiempo hubiera vuelto atrás. Con el mismo sadismo de antaño los representantes uniformados del terrorismo de estado aporrearon a los estudiantes. A decir la verdad sólo noté una diferencia: bajo la dictadura de Franco los uniformes eran de color gris.
Para colmo de desdichas el presidente de la Generalitat, José Montilla (del partido PSC, llamadamente socialista) se atrevió a afirmar que los estudiantes que ocupan las aulas constituyen una "minoría poco representativa" (La Vanguardia de anteayer).
Está claro que también en España las autoridades creen poder disimular los abusos tergiversando la verdad, porque en realidad puede que los estudiantes que están dispuestos a dejarse maltratar sean una minoría, pero decididamente no una minoría 'poco representativa'. Al contrario, representan una gran mayoría de los estudiantes y asimismo de profesores y catedráticos.
Lo positivo de las manifestaciones en España es que los manifestantes son conscientes de que los intereses de los obreros y de los estudiantes son los mismos. Eso se ve p.e. claramente en la manifestación del día 4 de este mes (también en Barcelona), donde se grabaron las imágenes siguientes:
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