Podríamos haberlo sabido: cuando la banda de Balkenende decidió ayudar a sacar las castañas estadounidenses del fuego a partir del; 1 de agosto de 2006 (para un período de un máximo de dos años), ya estaba claro que no iba a limitarse a eso, ya sólo por la avidez con la que a Balkenende le gustaba lamer los pies (o lo que sea) del criminal de guerra George W. Bush. Y efectivamente, por mucho que se hubiera acordado que en 2008 otros países mandarían 'sus' soldados a Afganistán para matar a ciudadanos y miembros de la resistencia afganos y para correr el riesgo de sacrificar allí sus propias vidas, en el año 2008 se decidió prolongar la misión neerlandesa con un nuevo período de dos años.
De verdad no iba a prolongarse nada más. Los últimos soldados neerlandeses deberían de haber salido de Afganistán en diciembre del año 2010. El 30 de noviembre Balkenende escribió lo siguiente al Parlamento: "Teniendo en consideración todo esto el gobierno está dispuesto a mantener la responsabilidad dirigente en apoyo a las autoridades afganas de Uruzgán, tanto en el terreno militar como en el terreno de la reconstrucción y la administración para un período adicional, limitado en el tiempo, de dos años, es decir del 1 de agosto de 2008 al 1 de agosto de 2010."
Sin embargo a bastante tiempo antes de que se acabe el segundo período de los soldados neerlandeses en Uruzgán (Afganistán), ya han empezado a remover el estercolero sangriento y hediondo de la internacionalista capitalista que a pesar de sus aventuras en Vietnam todavía no ha aprendido nada:
El 23 de septiembre Maxime Verhagen, el ministro neerlandés de asuntos exteriores, dio a conocer que no sabía "si podremos cargar la responsabilidad de todo [los asesinatos en Afganistán, etc.] sobre otros" (NRC/Handelsblad, 24 de septiembre de 2009).
También el ministro neerlandés de guerra, el llamadamente 'cristiano' Eimert van Middelkoop, tiene la idea de mantener un "equipo provincial de reconstrucción"(PRT) de un máximo de 500 soldados en Afganistán. Dice que no quiere especular sobre lo que ha de pasar más allá del año 2010, pero sí opina "que siempre serán posible nuevas misiones, también en Afganistán". (NRC/Handelsblad, 25 de septiembre de 2009)
Sin embargo Wouter Bos, uno de los vice-primerministros, ha dado a conocer que todo ha de acabarse con la actual misión, después de la cual "no quedará más espacio para mantener a militares en Uruzgán".
Su colega vice-primerministro Rouvoet, también uno de esos llamados 'cristianos', no es tan estricto: "Si recibimos solicitudes de contribuir en alguna parte de Afganistán, las analizaremos." (de Volkskrant, 25 de septiembre de 2009)
Entretanto la agencia ANP comunica que EE.UU., Australia y Afganistán han insistido en que quieren que los Países Bajos permanezcan más tiempo en Afganistán. Eso al menos es lo que escribe Maxime Verhagen al parlamento. (De Pers, ayer)
Mientras que la situación en Afganistán cada día empieza a parecerse más a la situación en Vietnam (1957-1975) y que toda clase de altas personalidades militares de EE.UU. dan a entender que lo mejor sería retirarse de Afganistán (véase p.e. De Pers del 12 de agosto, Trouw del 31 de agosto, La Vanguardia del 9 de septiembre, el New York Times del 13 de septiembre, NRC/Handelsblad del 26 de septiembre de este año), nos podemos jugar la cabeza de que también después de 2010 habrá soldados neerlandeses por un lado asesinando y por otro lado matados y que se seguirán despilfarrando enormes cantidades de dinero neerlandés en favor de los proyectos capitalistas de Estados Unidos. Al fin y al cabo Wouter 'chaquetero' Bos es el único que ha afirmado en términos absolutos de que el año 2010 acabará con todas las actividades bélicas neerlandesas en Afganistán.
Y todo eso sólo porque a Balkenende le encanta tanto ser recibido en la Casa Blanca de Washington...
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