Nadie podrá hacerme creer que Bush haya leído textos del filósofo griego Arquímedes (287 - 212 antes de nuestra era), pero por lo visto sí dispone de consejeros con una base más amplia (aunque no comprendo cómo personas inteligentes pueden ser tan tontos como para trabajar para él).
Los nuevos planes (ya firmados por Bush el 6 de octubre) de la nueva National Space Policy [Política Espacial Nacional] dejan pensar al menos que uno de ellos haya comprendido lo que Arquímedes quería decir con la sugerencia de que desde un punto en el espacio, se podría "sacar la tierra de su eje".
Esto sin duda alguna forma la base de la idea de prohibir el acceso al espacio a todos los "enemigos a los intereses de los EE.UU.". El preámbulo pone que "La libertad de acción en el espacio es tan importante para los EE.UU. como el dominio en el aire y en el mar".
El régimen promete (según un artículo en el Washington Post) que "esta política no está intencionada para el desarrollo o la utilización de armas en el espacio. ¡Punto final!".
No tengo ninguna confianza en esta promesa. Estos últimos años la mentira se ha convertido en el factor dominante en todas las comunicaciones de la Casa Blanca. Además me parece imposible que sin utilizar armas se pueda evitar que "enemigos" hagan uso del espacio. No me parece muy probable que Bush bombardee una base de lanzamientos en la China o en Rusia, pero no estaría nada sorprendido si ya ahora existen satélites provistos de un potente laser, con el cual se pueden eliminar satélites "enemigos".
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