Hoy Trouw ha dedicado un artículo, sin duda bienintencionado, a los trabajadores migrantes y la xenofobia, que sin embargo me parece juntado deprisa y chapuceramente, al menos la parte que se refiere a la situación en España (en cuanto a lo que señala de Gran Bretaña, no lo he mirado a fondo).
Por lo que se refiere a España sospecho (al menos en el instituto que se menciona en el artículo no he conseguido encontrar otra publicación pertinente) que se "cita" del informe Migration and the Economic Downturn: What to Expect in the European Union [La migración y la baja económica: Qué se puede esperar en la Unión Europea] de Demetrios G. Papademetriou, Madeleine Sumption y Will Sommerville del Migration Policy Institute de Washington, aunque Trouw sólo menciona a Sumption.
Según el artículo de Trouw las autoridades españoles prometen una prestación de retorno de 40.000 dólares a los inmigrantes que vuelven a sus países de origen. Para ello han de devolver su permiso de trabajo y no pueden volver a España durante tres años después de haber salido de España. Según Sumption (conforme lo que dice Trouw) sólo 1.400 inmigrantes habrían solicitado acogerse al retorno voluntario.
La web del INEM, el organismo español que es competente para esta prestación de 'retorno voluntario' no menciona ningún importe concreto, y tampoco sería posible, ya que el arreglo, que entró en vigor el 11 de noviembre de 2008 (ver aquí el Real Decreto N° 1800/2008) prevé una prestación que consiste en "el importe anticipado y acumulado correspondiente a los días de derecho de la prestación por desempleo de nivel contributivo que le corresponda o que le reste de percibir", y se paga en dos partes: el 40% en España (una vez concedido el derecho) y el resto (60%) después de volver al país de origen. Allí el trabajador retornado se tiene que presentar en una representación diplomática de España y entregar su tarjeta de identidad de extranjero (no se trata pues de ningún 'permiso de trabajo'). (Ver aquí un prospecto del INEM que especifica los detalles más importantes del arreglo.)
El importe sin duda viene de una fuente estadounidense (ya que en España se cuenta con los mismos euros que se utilizan en los Países Bajos) y me imagino que en el texto original se habrá hablado de una "green card" ('tarjeta verde'), lo que, por no complicar las cosas, se ha traducido por 'permiso de trabajo'.
Es cierto que se informó (el 14 de enero de 2009, por el Ministerio de Trabajo e Inmigración) que 1.400 personas habían solicitado acogerse al retorno voluntario, pero el día 3 de febrero (o sea más que una semana antes del artículo de Trouw) este número ya había alcanzado los 2.213. (Europa Press, 3 de febrero de 2009)
Por lo demás la situación no es -aunque el artículo de Trouw parece sugerirlo- que este retorno voluntario de repente haya aparecido de la nada. Ya antes, y mucho tiempo antes de la actual crisis económica, ya había planes para estimular que los inmigrantes volvieran a sus países de origen (véase p.e. un artículo en ABC del 16 de abril de 2003).
En este contexto Trouw también cita a Henk van Houtum, jefe del Nijmegen Centre for Border Research: "Lo que hace España se llama social dumping. Moralmente es irresponsable y no pone la culpa con las personas correctas. Los migrantes no tienen la culpa de la crisis económica."
Me gustaría saber qué opina Van Houten sobre la Ley de Retorno neerlandesa, que para muchos inmigrantes que retornan es mucho más limitada. En función de su situación reciben una compensación de los gastos del traslado y un importe para los gastos en los dos primeros meses después de su vuelta a su país. O, si cumplen con ciertos requísitos adicionales, reciben la compensación de los gastos del traslado y una paga mensual, en principio vitalicia. (Consultad aquí el prospecto en neerlandés y un resumen en castellano de la "Ley de Retorno" en la web del organismo competente, el Sociale Verzekeringsbank.)
Mientras que el arreglo español prevé la posibilidad de volver a España, en los Países Bajos volver sólo es posible dentro del primer año después de abandonar el país. Después de más de un año en el país de origen el remigrante -con respecto al derecho de volver a residir en los Países Bajos- se encuentra en la misma situación que cualquier otro extranjero.
En España, al contrario, cualquier retornado que antes de abandonar España tenía residencia temporal o permanente puede volver a residir en España con el mismo título, una vez haya estado fuera del país durante tres años.
Por consiguiente yo pienso que el dumping neerlandés es bastante más asocial que el español.
Y el comentario de Van Houtum sobre la irresponsabilidad moral por supuesto no se limita a los inmigrantes, sino a todos los trabajadores, que son las víctimas de la actual crisis económica. Los trabajadores no tienen la culpa de la crisis económica. Los culpables son los banqueros, las multinacionales y los gobiernos de los países capitalistas. Sin embargo ellos no son los que sufren por su política de explotación. ¡Eso es lo que yo llamo 'moralmente irresponsable'!
(*) 'Oprotpremie' es un término cínico que no se puede traducir (al menos yo no sabría hacerlo), pero se puede definir como 'una bonificación que se le dan a uno para que se largue'.
Por lo que se refiere a España sospecho (al menos en el instituto que se menciona en el artículo no he conseguido encontrar otra publicación pertinente) que se "cita" del informe Migration and the Economic Downturn: What to Expect in the European Union [La migración y la baja económica: Qué se puede esperar en la Unión Europea] de Demetrios G. Papademetriou, Madeleine Sumption y Will Sommerville del Migration Policy Institute de Washington, aunque Trouw sólo menciona a Sumption.
Según el artículo de Trouw las autoridades españoles prometen una prestación de retorno de 40.000 dólares a los inmigrantes que vuelven a sus países de origen. Para ello han de devolver su permiso de trabajo y no pueden volver a España durante tres años después de haber salido de España. Según Sumption (conforme lo que dice Trouw) sólo 1.400 inmigrantes habrían solicitado acogerse al retorno voluntario.
La web del INEM, el organismo español que es competente para esta prestación de 'retorno voluntario' no menciona ningún importe concreto, y tampoco sería posible, ya que el arreglo, que entró en vigor el 11 de noviembre de 2008 (ver aquí el Real Decreto N° 1800/2008) prevé una prestación que consiste en "el importe anticipado y acumulado correspondiente a los días de derecho de la prestación por desempleo de nivel contributivo que le corresponda o que le reste de percibir", y se paga en dos partes: el 40% en España (una vez concedido el derecho) y el resto (60%) después de volver al país de origen. Allí el trabajador retornado se tiene que presentar en una representación diplomática de España y entregar su tarjeta de identidad de extranjero (no se trata pues de ningún 'permiso de trabajo'). (Ver aquí un prospecto del INEM que especifica los detalles más importantes del arreglo.)
El importe sin duda viene de una fuente estadounidense (ya que en España se cuenta con los mismos euros que se utilizan en los Países Bajos) y me imagino que en el texto original se habrá hablado de una "green card" ('tarjeta verde'), lo que, por no complicar las cosas, se ha traducido por 'permiso de trabajo'.
Es cierto que se informó (el 14 de enero de 2009, por el Ministerio de Trabajo e Inmigración) que 1.400 personas habían solicitado acogerse al retorno voluntario, pero el día 3 de febrero (o sea más que una semana antes del artículo de Trouw) este número ya había alcanzado los 2.213. (Europa Press, 3 de febrero de 2009)
Por lo demás la situación no es -aunque el artículo de Trouw parece sugerirlo- que este retorno voluntario de repente haya aparecido de la nada. Ya antes, y mucho tiempo antes de la actual crisis económica, ya había planes para estimular que los inmigrantes volvieran a sus países de origen (véase p.e. un artículo en ABC del 16 de abril de 2003).
En este contexto Trouw también cita a Henk van Houtum, jefe del Nijmegen Centre for Border Research: "Lo que hace España se llama social dumping. Moralmente es irresponsable y no pone la culpa con las personas correctas. Los migrantes no tienen la culpa de la crisis económica."
Me gustaría saber qué opina Van Houten sobre la Ley de Retorno neerlandesa, que para muchos inmigrantes que retornan es mucho más limitada. En función de su situación reciben una compensación de los gastos del traslado y un importe para los gastos en los dos primeros meses después de su vuelta a su país. O, si cumplen con ciertos requísitos adicionales, reciben la compensación de los gastos del traslado y una paga mensual, en principio vitalicia. (Consultad aquí el prospecto en neerlandés y un resumen en castellano de la "Ley de Retorno" en la web del organismo competente, el Sociale Verzekeringsbank.)
Mientras que el arreglo español prevé la posibilidad de volver a España, en los Países Bajos volver sólo es posible dentro del primer año después de abandonar el país. Después de más de un año en el país de origen el remigrante -con respecto al derecho de volver a residir en los Países Bajos- se encuentra en la misma situación que cualquier otro extranjero.
En España, al contrario, cualquier retornado que antes de abandonar España tenía residencia temporal o permanente puede volver a residir en España con el mismo título, una vez haya estado fuera del país durante tres años.
Por consiguiente yo pienso que el dumping neerlandés es bastante más asocial que el español.
Y el comentario de Van Houtum sobre la irresponsabilidad moral por supuesto no se limita a los inmigrantes, sino a todos los trabajadores, que son las víctimas de la actual crisis económica. Los trabajadores no tienen la culpa de la crisis económica. Los culpables son los banqueros, las multinacionales y los gobiernos de los países capitalistas. Sin embargo ellos no son los que sufren por su política de explotación. ¡Eso es lo que yo llamo 'moralmente irresponsable'!
(*) 'Oprotpremie' es un término cínico que no se puede traducir (al menos yo no sabría hacerlo), pero se puede definir como 'una bonificación que se le dan a uno para que se largue'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario