Maxime Verhagen, el ministro neerlandés de asuntos exteriores, ha tomado medidas diplomáticas contra el Vaticano. Ese estadito en su opinión no hace lo suficiente contra el obispo británico Williamson, quien afirma que los nazis en la Segunda Guerra Mundial no mataron a seis millones de judíos, sino sólo dos o trescientos mil. (NRC de hoy)
Y eso lo dice el ministro que justifica las masacres israelíes en la franja de Gaza, con el argumento de pacotilla de que Israel tiene el derecho de "defenderse a sí mismo".
Ese mismo Israel, como todo el mundo debería de saber, mató recientemente en el curso de tres semanas a más de 1.300 palestinos, entre los cuales más de 400 niños (y ¡hasta bebés!).
Ese mismísimo Israel, como todo el mundo tendría que saber, desde el año 1947 ha matado, deportado, robado, torturado, violado y abusado a muchos miles de palestinos para convertir en realidad un viejo cuento.
Esos palestinos, en opinión del cristianofundamentalista Verhagen no tienen el derecho de defenderse a sí mismos. No no, tendrán que estar contentos de tener el privilegio de poder ser asesinados en nombre del libro de cuentos judeocristiano, ¿verdad?
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